UN DÍA FUERA DEL TIEMPO: REFLEXIÓN Y MEDITACIÓN
Este 25 de julio de 2016 según el calendario maya es el día fuera del tiempo. Según el calendario gregoriano el año maya acaba el 24 de julio y comienza de nuevo el 26. Esto no significa que se pare el tiempo ni nada de eso, sino que este día que queda “fuera” del calendario de las trece lunas, puede ser enfocado de distintas formas. En este pequeño artículo comparto contigo la forma en que lo voy a tratar.
A pesar de que estamos culturalmente acostumbrados a hacer balance de nuestra experiencia de vida cuando comienza nuestro año nuevo, otros muchos hemos decidido salirnos de lo culturalmente aceptado y hemos optado por introducir otras actividades y conductas en nuestra vida. Creo, que este día fuera del tiempo, es uno de esos casos. En este día se nos ofrece otra oportunidad de reflexión y meditación con nosotros mismos sobre nuestra vida, nuestros pasos, nuestro estar, nuestras acciones… Por supuesto, es algo que tiene que apetecernos hacer. Aunque muchos nos tomamos este momento el día de nuestro aniversario de vida, lo novedoso (en mi caso personal) es la distinta energía en la que estamos hoy, 25 de julio. A mí, por cumplir en pleno invierno, me genera mucho contraste, ya que la energía de introspección es bien distinta. En esta época del año el verano, me ofrece otros tonos y colores.
Entonces, ¿qué hacer este día fuera del tiempo? Por hacer, podemos hacer muchas cosas siempre y cuando estén sintonizadas con quien soy en este presente momento. En mi caso, este día coincide con el final de un trabajo energético en el que he realizado todo viaje interior de vida a lo largo de estos treinta años. He vivido una especie de actualización de mi pasado, desde un punto de vista más maduro. He actualizado estados internos de mi infancia y he comprendido por qué necesité vivir ciertas cosas. Por ello, te propongo que te tomes un rato contigo mismo y hagas una pequeña recapitulación. En esta recapitulación harás un viaje interno desde el comienzo de tus días hasta tu presente y todo ello de mano de tu escritura y tu alma. Haz el ejercicio a solas y cuando tengas un momento de calma.
Ejercicio de recapitulación:
-Toma un folio en sentido apaisado y haz cuatro columnas.
-En cada columna escribe los siguientes títulos: infancia, adolescencia, juventud, actualidad.
-Ahora se trata de que debajo de los tres primeros títulos escribas seis palabras que definan o evoquen esos momentos de tu vida. Tres han de ser positivas (deben evocar algo que te resulte agradable) y las otras tres han de ser negativas (algo que te incomode o que te haga sentir tristeza o miedo). Te pongo un ejemplo:
Infancia
Risa, novedad, estabilidad.
Enfado, tristeza, rechazo.
Así con el resto de columnas salvo la última, es decir, “actualidad” la vas a dejar vacía.
Cuando hayas acabado, tal vez te sientas algo más incómodo que al principio. No te preocupes, es normal, cuando recordamos momentos de nuestro pasado que no han sido agradables nos incomodamos. También es cierto, que esto es un indicador.
A continuación, ¿qué hacemos con la columna vacía? Es aquí donde vas a tomarte un tiempo para ti. Vas a OBSERVAR los momentos de esas tres etapas de tu vida y vas a intentar localizarlos en tu vida presente. Vas a ver los que siguen estando (aunque tal vez algo variados pero todavía permanecen) y los que han quedado olvidados o soterrados. Cuando los hayas localizado, escríbelos todos en la columna “actualidad”. Y por último, ¿qué falta ahí que no ha estado y que te gustaría que estuviera? Escríbelo también.
Y esto, ¿para qué? Para muchas cosas, si observas bien verás dónde has estado y dónde estás. Verás que hay ciertas partes de ti que siguen estando en el mismo punto que estaban a pesar de haber pasado el tiempo. También podrás ver hacia dónde quieres ir, porque no dudes, que sabiendo dónde estás puedes definir y decidir hacia dónde quieres ir. Puedes quitar aquello que no quieras si es que te atreves a hacerlo y puedes tomar contacto con partes de ti mucho más profundas que se expresan a través de todos y cada uno de los conceptos que has escrito. Son partes de nosotros que nos ofrecen posibilidades y se nos muestran cuando observamos. Simplemente, observando, abrimos otras puertas.
Así que, feliz día fuera del tiempo. Si deseas compartir tu experiencia conmigo, estaré encantada de leerte. Un abrazo.
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